Trampa nº 6: Falsos profetas

¿Conoces a este tipo? Es Shingy. Alias David Shing.

Su cargo era Digital Prophet en AOL de 2011 a 2017. Ahora trabaja en Verizon, donde su cargo es... Profeta Digital. Es la respuesta digital a DJ Khaled.

Parece salido de Matrix, y supongo que eso es lo que quieres que parezca tu gurú digital. De hecho, he visto uno de sus vídeos para preparar esto y, adivina qué, tiene algunas opiniones totalmente razonables y bien fundadas sobre las cosas. Pero fundamentalmente se presenta en conferencias y trata de ver el futuro. Si lo pensamos bien, no hay nada nuevo en el empleo de futurólogos. Hoy se pronuncian por Twitter, hace dos mil años se comunicarían a través de entrañas de pollo.

Creo que muchos de nosotros sacamos mucho provecho de las conferencias, son una forma segura deampliar la mente en el trabajo( ), y todos nos vamos sintiéndonos un poco más ilustrados. No se consigue una conferencia interesante diciéndole a la gente que los mejores resultados se obtienen haciendo un seguimiento del progreso y trabajando diligentemente para corregir el rumbo. Conseguirás mucha más tracción diciendo a la gente que nadie visita nunca la página de inicio o lo que sea. Por cierto, es una simplificación excesiva. Pero nadie tiene tiempo de exponer argumentos sutiles en una conferencia.

Y creo que por eso es tan tentador. Si quieres expandir tu mente, a veces la mejor manera de hacerlo es salir de tu día a día y adentrarte en un universo paralelo donde todas las reglas son diferentes. A veces los desarrolladores lo hacen cambiando de lenguaje de programación. Es una forma de rejuvenecer tu interés, pero no significa que todo lo que aprendiste antes se haya echado a perder.

El problema viene cuando oyes hablar a alguien y te quedas tan impresionado que decides que has encontrado a tu Gurú y le confías tus operaciones digitales para que forme tu equipo o dirija tu RFI. Esto me ocurre a menudo. Puede que alguien haya tenido un buen comienzo en un gran medio de comunicación. Desde entonces, no ha dejado de trabajar como consultor. Mantiene sus contactos, pero siempre abandona el barco justo antes de que el proyecto en el que trabajaba llegue a buen puerto.

Ahora dirigen tus procesos digitales. Insisten en que el producto debe construirse sobre una nueva pila funcional oscura que va a multiplicar por 10 tu productividad. Invitan a sus compinches a participar en tu RFP. Siguen intentando aplicar grandes estrategias mediáticas a su organización. Dan cuerda a su personal con sus opiniones poco prácticas. No paran de llamar por teléfono para concertar su próxima cita antes de que todo se vaya al garete.

Enhorabuena, te la has jugado.

He aquí cómo evitarlo.

1. No te fíes de poner a un solo hombre o mujer al mando de tu estrategia. Lo más probable es que recibas la opinión sesgada de una sola persona.
   
   
2. Cuando compruebe las referencias, vaya más allá de las intervenciones estratégicas y pregunte por los resultados. Sí, realizaron un informe o un proceso, pero ¿cuáles fueron sus resultados en el mundo real? ¿Llevó el proceso a un resultado tangible? ¿Quedó el consultor para verlo?
   
   
3. Mantener una gran lista de influencias. Sigo a gente en Twitter que aboga por la agilidad, pero también a gente que cree que la agilidad está acabando con el arte de la arquitectura de software, a gente que cree que es inhumano desplegar los viernes, a gente que cree que tu organización está fracasando si no puede hacerlo. Me ayuda a asumir nuevas ideas sin caer en la exageración. Salir de mi zona de confort y ver las cosas desde diferentes perspectivas sin seguir servilmente las tendencias.

No te dejes engañar por Falsos Profetas, solo sigue lo que yo hago.

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